CASO ERE: la mano que borra los ERE

Publicado el: Vie, 28/06/2024 - 09:39 Por: drupaladmin
Inmaculada Montalbán, aplaudida por José Antonio Griñán y Fuensanta Coves tras recibir la Medalla de Andalucía.EFE

Los lazos con el PSOE de Inmaculada Montalbán, la mano que borra los ERE: del trampolín del CGPJ a la Medalla de Andalucía concedida por Griñán. La magistrada del Constitucional (sic) recibió en 2012 la condecoración del ex presidente condenado por el Supremo

Artículo de Chema Rodríguez, Sevilla, Actualizado Lunes, 24 junio 2024, publicado en el diario El Mundo.

N. del E.: Se incluye este Artículo por su especial interés para constatar como el PSOE utiliza la manipulación del Poder Judicial para su exclusivo beneficio

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28 de febrero de 2012. En el escenario del Teatro de la Maestranza de Sevilla, una mujer vestida enteramente de blanco mira al suelo mientras escucha la lectura del decreto por el que la Junta de Andalucía le ha concedido la Medalla de la comunidad.

Según la resolución del Boletín Oficial que firma el entonces presidente, José Antonio Griñán, se lo ha ganado por su «firme defensa del Estado de Derecho y su esfuerzo por alcanzar el ideal de una convivencia sin violencia». Se levanta acto seguido, se dirige a Griñán y le saluda con dos besos para, a continuación, recibir la condecoración de manos de la presidenta del Parlamento, Fuensanta Coves.

La mujer de blanco que entonces miraba al suelo era Inmaculada Montalbán y lo que no sabía entonces es que doce años después en sus manos iba a estar el destino del mismo Griñán al que había saludado efusivamente y que ella firmaría el borrador de la sentencia con la que, salvo sorpresa, el ex presidente podría quedar absuelto de la condena que le cayó por el mayor caso de corrupción en la historia de este país, el de los ERE. No sólo él, sino también el ex presidente Manuel Chaves y la mayor parte de los consejeros que fueron declarados culpables por la Audiencia Provincial de Sevilla, primero, y por el Tribunal Supremo, después.

Montalbán, vicepresidenta hoy del TC, defiende en el borrador la anulación del delito de malversación -que le supuso a Griñán una pena de seis años de cárcel- después de hacer lo mismo con la prevaricación con motivo del recurso estimado parcialmente a la ex ministra y también ex consejera andaluza Magdalena Álvarez. Plantea la magistrada que la prevaricación y la malversación son delitos conectados, de tal forma que al desaparecer uno, por fuerza tiene que desaparecer el otro. En pocas palabras, se trata de reducir el caso de los ERE, un expolio de 679 millones de euros públicos, a la actuación de «cuatro golfos», según la versión que en los primeros momentos del caso que destapó la juez Mercedes Alaya dieron desde el gobierno autonómico y desde el Partido Socialista.

El próximo 2 de julio defenderá esa postura en el pleno del TC que tiene que examinar los recursos de los ex consejeros socialistas Carmen Martínez Aguayo, Antonio Fernández y Francisco Vallejo, además de los ex altos cargos Jesús María Rodríguez y Miguel Ángel Serrano y el 16 de ese mes, si su postura es avalada por la mayoría de sus compañeros (algo más que probable), volverá a promover el borrado de la malversación y de la prevaricación respecto al propio Griñán y a Chaves.

Que Montalbán sea la mano que borre los ERE no es algo que haya sorprendido dentro de la carrera judicial y, más aún, entre quienes han coincidido con ella a lo largo de su ya dilatada trayectoria, en la que la vicepresidenta del TC no ha ocultado en ningún momento su identificación con los postulados del Partido Socialista ni tampoco sus buenas relaciones con destacados dirigentes de este partido, que ha cultivado casi desde que debutó en la judicatura y que le han valido, en opinión de antiguos compañeros, una promoción rápida hasta alcanzar la cumbre, en 2021, con su nombramiento para el TC.

Antes ya había formado parte, igualmente a propuesta del PSOE, del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), donde le dio brillo a su carrera especialmente en su faceta de experta en violencia contra la mujer, llegando a presidir el observatorio del órgano de gobierno de los jueces en esta materia.

Precisamente, el hecho de que se convirtiese en la primera mujer andaluza en formar parte del sanedrín de la judicatura española fue uno de los argumentos de peso que esgrimió el gobierno presidido en 2012 por José Antonio Griñán para incluirla en la nómina de andaluces ilustres merecedores de la Medalla de Andalucía, que se entrega con motivo del día de la comunidad, el 28 de febrero.

En el mundillo judicial tampoco sorprendió aquello, cuenta un antiguo compañero de promoción, ya que sus vínculos con el PSOE, muy en especial con el PSOE andaluz, eran algo sobradamente conocido. Es más, varias fuentes conocedoras de la trayectoria de Montalbán coinciden en que en su designación para el CGPJ en el año 2008 tuvo mucho que ver el socialismo andaluz, cuyo secretario general le concedería, cuatro años después, una condecoración por ese mismo motivo.

PREMIOS DE MANOS DEL PSOE

La medalla de Andalucía no fue, con todo, el único premio que le dieron los sucesivos gobiernos socialistas. El curriculum de Montalbán está lleno de reconocimientos otorgados, directa o indirectamente, por el PSOE. Como el Premio Meridiana, que la Junta concede por la lucha contra la violencia de género y que la magistrada recibió en 2000 y en 2010.

Cuando fue nombrada vocal del CGPJ, hubo cargos públicos socialistas que no dudaron en piropearla públicamente y reivindicar su cercanía. Tal fue el caso de la secretaria local del PSOE en Motril (Granada), Flor Almín, que la felicitó "en nombre de los socialistas".

"Si pudiera tener carné del PSOE, lo tendría", dice este ex compañero de Montalbán que sostiene que la vicepresidenta del TC jamás ha ocultado ni disimulado su afinidad ideológica con los socialistas y que, más aún, ha defendido y defiende que la ideología tiene que estar muy presente en la labor del juez, que la política no hay que dejarla fuera de la sala de vistas, sino todo lo contrario.

Su especialización en materia de violencia de género -teórica porque nunca ha ejercido en esa jurisdicción- coincidía en sus planteamientos con los del PSOE y eso fue uno de los factores que propició su cercanía al poder socialista en Andalucía. Recuerdan sus compañeros que en su paso por el CGPJ no se salió en ningún momento del guión y su voto fue siempre el que se esperaba. "Lo que le vaya bien al PSOE lo va a hacer y punto", dice, categórico, un magistrado de su misma promoción.

Fue en aquellos años en los que presidió el Observatorio contra la Violencia sobre la Mujer cuando trabó relación con quien luego sería presidenta del Senado y ministra de Justicia, Pilar Llop, entonces abogada y asesora a sus órdenes.

Otro magistrado, esta vez del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), donde Montalbán tiene su plaza en la Sala de lo Contencioso, incide en que "siempre" se notó su afinidad ideológica con el PSOE, aunque defiende que en los años en los que coincidieron en el Alto Tribunal andaluz la polarización y la politización judicial no habían llegado a los extremos actuales.

A este magistrado, ya retirado, sí le sorprende lo que ha planteado su antigua colega del TSJA en el borrador de sentencia que se conoció ayer. No se lo esperaba confiesa, a pesar de sus inclinaciones políticas y añade que le "cuesta" creer que su cercanía al PSOE haya tenido algo que ver con un posicionamiento que para nada comparte.

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darthvadito
25/06/2024 05:58


679 millones de euros. Pero las 100 portadas de El País fueron para los 3000 eur del caso traje de Camps, una corrupción intolerable. El progresismo español es totalitario, lo contrario de lo que predica, pero su electorado tiene tragaderas, y asume el discurso de buenos y malos que les dictan, en un ejercicio de síntesis que busca movilizar el voto desde reacciones primarias del ser humano, mensaje directo a la gónadas, mecanismo fácil para votar que se acoge desde la comodidad, con tal de no pensar. Sánchez está haciendo un daño tremendo a la democracia española.